Ticos urgen dinero ya y no ven depósitos a plazo como una opción

Invertir en depósitos a plazo para recibir una ganancia en un futuro cercano no es una prioridad para los ticos actualmente, quienes prefieren tener su dinero a la vista ante una eventualidad, no tienen recursos para hacerlo, o bien, las tasas de interés no son atractivas.

La incertidumbre sobre el futuro y el bajo rendimiento que se está pagando en el mercado, influyen en la decisión de los costarricenses.

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Y es que desde abril se reporta una caída en los depósitos a plazo en colones, a la vez que las tasas de interés pagaderas son menores en relación con el año pasado.

Un caso similar se reporta en los depósitos en moneda extranjera, aunque en mayo tuvieron un leve repunte que no cambió la tendencia.

No es aplicable únicamente como argumento apuntar a la afectación de ingresos por la pandemia, puesto que más bien hace un año los recursos a final de mes eran menores para las familias, y justamente, a pesar de que quizás eran los puntos más críticos económicamente durante la Covid-19, con los cierres y suspensión/disminución de jornadas, los saldos de este instrumento a final de mes reportados por el Banco Central eran superiores.

Es decir, se podría aceptar más como justificación la incertidumbre sobre el futuro y preferencia a aquellos instrumentos que dejan recursos a la vista, para satisfacer objetivos al corto plazo, tal y como comentó Rodrigo Cubero, presidente del Banco Central en la revisión del programa macroeconómico.

Además, se entiende que las tasas de interés están bajas, lo que hace que los rendimientos otorgados en este instrumento sean menores.

Las opciones de mediano y largo plazo tienen el propósito de generar rentabilidades por encima del promedio del mercado, debido a que ofrecen una retribución por el riesgo asumido al invertir en productos justamente a esos de plazos, por lo que esos “premios” deberían ser atractivos por el usuario, y ahora posiblemente no lo vean como tal.

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Mientras que en el corto plazo se ofrece liquidez y seguridad ante un entorno incierto, como el vivido durante la pandemia, explicando que en este momento el tico no quiera esperar por ver dinero.

“Pero no es efectivo para proteger el valor adquisitivo del principal, especialmente en un ambiente donde podríamos empezar a registrar niveles más altos de inflación”, advirtió Adriana Rodríguez, gerente general del Puesto de Bolsa de ACOBO.

Sobre el futuro hay instrumentos como, por ejemplo, los depósitos de ahorro que sí dan señales de repuntar en el sistema financiero.

Aunque inconsistentemente, pues el saldo a fin de mes en colones, si bien es superior a lo mostrado hace un año, un mes sube y al siguiente se presenta un decrecimiento.

Mientras que en dólares sí mes a mes los números son positivos.

Este instrumento usualmente es empleado en el caso de tener eventualidades, poder tener recursos para cubrirlo; y el objetivo de proteger ese dinero es impedir esa disponibilidad permanente, que puede derivar en un mal uso.

Por lo tanto, por la crisis de la Covid-19, donde los ingresos de los ticos se vieron reducidos y, en muchos casos, solo se podía pensar en las necesidades próximas, ahorrar no era una opción.

No obstante, como esos ingresos de a poco ya muestran mejorías, por ejemplo, ¢688.779 es el salario promedio de los cotizantes a mayo de este año, cuando en el 2020 era de ¢651.003, puede existir más espacio para el ahorro.