Rutinas, tiempo en familia y actividad física son clave para salud mental de los niños y jóvenes

La salud mental de los niños y jóvenes, tras aislamientos sociales y restricciones por la Covid-19, se ha visto muy comprometida. Estas situaciones han propiciado el aumento de enfermedades mentales.

Compartir tiempo de calidad en familia, así como estimular la actividad física son clave para mantener una salud mental propicia. También el mostrar interés en los asuntos personales, y promover rutinas puede significar mucho para los niños y jóvenes en casa.

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Si hay un grupo vulnerable a la limitación para compartir libremente con sus amigos y compañeros, esos son los niños y adolescentes; para quienes una saludable socialización es clave en su desarrollo emocional y afectivo.

Así lo comentan Arantxa León y Mauricio Sánchez, expertos de World Vision, señalando que es de suma importancia observar las señales de malestar emocional para actuar con prontitud y eficacia.

Entre esos se puede resaltar la dificultad para dormir o el cansancio extremo. Asimismo, el aumento de las conductas agresivas y la incapacidad para concentrarse. El sentir miedo o inseguridad, o la pérdida de interés en labores académicas también se consideran una alerta.

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Otra señal importante es la disminución del apetito, o bien un aumento notable en la ingesta de alimentos de manera compulsiva. También un aumento o reducción sensible del peso.

Para diciembre de 2020, el 34% de los jóvenes adolescentes señalaron sentir ansiedad, y otro 45% indicó tener una percepción pesimista del futuro, según datos de UNICEF Costa Rica.