Competencias y habilidades del profesional del futuro
Marco Esquivel Barquero redacció[email protected] | Viernes 10 enero, 2025
Marco Esquivel Barquero,
MBA, MSc., Rector Universidad San Marcos
La transformación digital y los avances tecnológicos están cambiando la estructura misma del mercado laboral. La llamada revolución 4.0 está redefiniendo no solo cómo trabajamos, sino qué se espera de los profesionales en términos de habilidades y competencias. Debido a esto, el profesional del futuro debe estar preparado para desarrollarse en un entorno cada vez más dinámico, interconectado y automatizado, donde la adaptabilidad y el aprendizaje continuo son esenciales.
La era 4.0 conlleva a la integración de la inteligencia artificial, la automatización, el big data y el internet de las cosas (IoT), en todos los sectores. Estos avances han generado una disrupción en las tareas rutinarias, llevando a la caducidad muchos oficios tradicionales. Por ejemplo, trabajos repetitivos y manuales están siendo reemplazados por máquinas, lo que implica que los profesionales deben adquirir competencias más orientadas a la innovación, el pensamiento crítico y la resolución de problemas.
En este panorama, emergen nuevas habilidades clave para los profesionales. Detallo cinco de gran importancia:
1. Alfabetización digital: entender cómo funcionan los algoritmos, cómo se procesan los datos y cómo aprovechar la tecnología para tomar decisiones informadas. Esta habilidad es la base sobre la cual se construirán muchas de las competencias del futuro.
2. Pensamiento crítico y la capacidad de análisis: con la cantidad masiva de datos disponibles y la automatización de tareas, los profesionales deben ser capaces de interpretar la información correctamente, identificar patrones relevantes y generar estrategias innovadoras que se adapten a las necesidades cambiantes del mercado. Los profesionales que sepan gestionar y aplicar el conocimiento serán los más competitivos.
3. Inteligencia emocional: en un mundo donde la automatización reemplaza muchas tareas, el trabajo en equipo, la negociación, la empatía y la capacidad de inspirar a otros seguirán siendo características humanas muy apreciadas. Los líderes del futuro deberán combinar habilidades técnicas con la capacidad de gestionar equipos diversos, fomentar la colaboración y adaptarse a entornos multiculturales.
4. Agilidad: la velocidad con la que surgen nuevas tecnologías, tendencias y modelos de negocio, obliga a las organizaciones y a sus profesionales a adaptarse rápidamente. La resiliencia, la capacidad para aprender de los errores y la disposición para probar nuevas ideas se han convertido en factores determinantes para el éxito.
5. Gestión del tiempo: la era 4.0 promueve entornos laborales más flexibles, donde el teletrabajo y las estructuras menos jerárquicas predominan. Por esta razón, los profesionales deben saber cómo organizar su jornada laboral, priorizar tareas y mantenerse motivados sin la supervisión constante.
La era 4.0 plantea un desafío de adaptación constante para los profesionales, las competencias tecnológicas, pero también las sociales y cognitivas, serán decisivas. Las personas deberán ser capaces de integrar conocimientos técnicos con habilidades humanas, permitiéndoles navegar en un entorno cada vez más interconectado, diverso y automatizado.