Sostenibilidad y energías renovables impulsan carreras “verdes”

Adecuar la oferta académica a un mundo que cada vez se preocupa más por el ambiente es la propuesta que hacen varias universidades e institutos en el país.

La Universidad Técnica Nacional (UTN), Texas Tech University, la Earth y el Instituto Nacional de Aprendizaje (INA) son algunos ejemplos de los ajustes que han realizado a sus programas.

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En el caso de la UTN, es la única universidad que tiene aprobada la carrera de licenciatura en Ingeniería Energética con énfasis en Fuentes Renovables, que impartirá en su sede de Guanacaste, a partir de 2021.

Se elige esta sede ya que la zona reúne todas las energías renovables del país y actualmente produce el 40% de energía eléctrica a nivel nacional.  

Con esta carrera, Costa Rica será un referente en el desarrollo tecnológico energético a nivel centroamericano por la formación de profesionales con estándares de acreditación internacional y por el impulso de proyectos energéticos fundamentados en procesos de investigación y extensión acorde con las demandas actuales y futuras del istmo.

“En muchas ocasiones se tiende a impartir carreras nuevas en las sedes centrales, y en este caso, la idea de impartir la carrera en una sede regional permite llevar desarrollo a zonas más alejadas y vulnerables desde el punto de vista social y económico”, añadió Javier Barrasa, coordinador del equipo de Gestión de la esta nueva carrera de la UTN.

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Por su parte, la Earth inició una capacitación de sus agrónomos en descarbonización, al promover un modelo de agricultura sostenible.

Otro que comulga con el ambiente es Texas Tech University con el bachillerato de Restaurant, Hotel and Institutional Management, que presenta una relación con el turismo sostenible, parte crucial del futuro de Costa Rica.   

En el caso del INA, desde el año pasado diseñó la creación de un curso técnico en Vehículos Híbridos y Eléctricos, al que le agregó el componente de conversión de vehículos de motor de combustión interna a propulsión eléctrica. 

También, destaca con el técnico en Eficiencia Energética, que arrancó en 2018 con la colaboración de la Agencia de Cooperación Alemana y que formará trabajadores vinculados con las necesidades del sector energético, que contribuyan al uso racional de la energía y a la reducción de los efectos del cambio climático.