Rompeolas en Caldera será reparado luego de 17 años del daño
Danny Canales [email protected] | Miércoles 18 septiembre, 2019 10:15 a. m.
En 2002 una tormenta dañó 60 metros del rompeolas que protege el puerto de Caldera de las altas mareas y del sedimento, y será hasta el próximo mes que inicien los trabajos para repararlo.
La mala condición de ese muro de contención ha afectado la operación del puerto en estos 17 años, pues genera fuertes mareas en los puestos de atraque y permite el ingreso de material que le resta profundidad.
Es un problema adicional que le genera al puerto del Pacífico, el cual está pronto a llegar a su máxima capacidad con el agravante que en un día de resaca lo saca de operación y provoca que los barcos hagan doble maniobra, incrementando los costos y encareciendo el precio de los productos que se importan por ese litoral.
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“El rompeolas se rompió y no se ha reparado por parte del MOPT, lo que ha hecho que la sedimentación en el puerto haya aumentado y nos haya hecho perder metro y medio de calado; es decir, que el puerto de 11 metros tiene 9,5 metros en la actualidad”, cuestionó Juan Ramón Rivera, presidente ejecutivo del Instituto de Puertos del Pacífico (Incop).
Consecuentemente, atender la estructura es la prioridad número uno dentro del plan de inversión que estudia el Gobierno para ampliar el principal puerto del Pacífico; de no hacerlo, se pone en riesgo el colapso de las operaciones ante el crecimiento del comercio en China y la Costa Oeste de los Estados Unidos.
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La inversión en el rompeolas será de $14 millones, anunció Marvin Sibaja, subgerente del Incop, quien destacó que las obras serán financiadas por el MOPT.
La terminal portuaria de Caldera es operada desde 2006 por la Sociedad Portuaria de Caldera mediante el modelo de concesión de obra pública para ampliar la terminal y equiparla a fin de que atender la demanda de carga.
Sin embargo, en el contrato no se consignó la reparación del rompeolas, por lo que es tarea del Gobierno.
Lo que sí deberá hacer el concesionario es dragar el sedimento del muelle una vez que se concluya la reparación del rompeolas para devolverle la profundidad original y aumentar su eficiencia, destacó Rivera.