¿Quién convenció al “Piojo” de dirigir la Tricolor? Nadie
Gaetano Pandolfo [email protected] | Lunes 13 enero, 2025
Sonrío discretamente cuando colegas criollos le preguntaron a Miguel Herrera, ¿cómo lo convencieron para dirigir a la Selección de Costa Rica?, interrogante incluso de la prensa mexicana, minutos antes de que el “Piojo” viajara a nuestro país.
Cuando un profesional está desocupado, no tiene trabajo y fue despedido por su último patrono, no hay que convencerlo para aceptar una nueva oferta laboral. Se va a ir de cabeza por la primera que se le presenta.
No es nuestra costumbre atacar, criticar o cuestionar en este caso a un director técnico, sin darle la oportunidad de mostrarse. Miguel Herrera, como cualquier otro profesional, en este caso de la dirección técnica, tiene el derecho de iniciar su trabajo al frente de la Tricolor sin cuestionamientos previos.
Ya habrá oportunidad de apoyarlo o cuestionarlo, una vez la Tricolor entre en acción y eso lo veremos pronto en el primer juego con el mexicano al frente, ante los Estados Unidos el día 22 en Orlando.
Pero, retornando al tema del “convencimiento”, a don Miguel no había que convencerlo de nada, máxime qué de los eventuales candidatos a dirigir a la Selección Nacional, ocupaba los últimos lugares entre las preferencias de los federativos, la prensa deportiva nacional y los aficionados.
Digamos que la escogencia del “Piojo” fue sorpresiva, a menos para nosotros, que sentíamos qué a niveles federativos, Ignacio Ambriz tenía más opciones.
Escogido don Miguel como técnico, enseguida se presentaron los argumentos acostumbrados y acomodados de sus nuevos patronos para justificar su nombramiento, basados en la recomendación del nuevo Director de Selecciones Nacionales, el también mexicano, Ignacio Hierro quien se decantó por Herrera.
Una Federación de Fútbol, convence a un director técnico de que acepte el cargo de entrenar a la Selección Nacional de su país, cuando está trabajando con otro seleccionado.
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Por ejemplo, Paraguay convenció a Gustavo Alfaro a dirigir al seleccionado guaraní, ofreciéndole más dinero, cuando don Gustavo era técnico de Costa Rica. Eso sí fue un convencimiento apoyado en pura billetera, pero repito, al “Piojo” nadie lo convenció de que aceptara ser técnico de la Selección Nacional.
Estaba desocupado, sin trabajo, sin ofertas de equipos de su país. Le ofrecen la oportunidad de dirigir un seleccionado nacional y en cinco minutos aceptó la propuesta. No había que convencerlo de nada.