La Costa Rica del Vaso Medio Lleno

Daniel Suchar Zomer, PhD

Analista Financiero. Profesor Universitario.

Email: [email protected]

En la compleja ecuación que define el estado económico de una nación, la metáfora del vaso medio lleno y medio vacío a menudo sirve como lente para interpretar el panorama. Sin embargo, en la vibrante realidad costarricense, la elección no se reduce a la percepción de un vaso, sino a la abundancia de opciones que se despliega ante sus ciudadanos.

En el panorama económico de Costa Rica, los indicadores recientes pintan un escenario alentador que refleja un notable crecimiento y estabilidad. El Banco Central, en su informe más reciente (31 Octubre), reveló cifras auspiciosas para el país, proyectando un crecimiento económico del +5% para el presente año y un sólido +4,3% para el próximo 2024. Estas estimaciones señalan una senda positiva para la economía tica, respaldada por diversos factores, siendo la 2da economía de la región en crecimiento (Panamá será +6%).

El Indicador Mensual de Actividad Económica (IMAE) no se queda atrás, evidenciando un crecimiento del +6,5% (Sept 2023). Dentro de este panorama, el régimen especial (Zonas Francas) destaca con un impresionante incremento del 12,8% (Sigue en doble dígito desde Agosto 2022), mientras que el Régimen Definitivo (85% del PIB de Costa Rica), sigue una trayectoria y recuperación saludable con un crecimiento del +5,5% para la misma lectura.

Estos indicadores subrayan la diversificación y fortaleza de la economía costarricense, que se beneficia de sectores clave para su desarrollo, apoyados también en los fenómenos de nearshoring y friendshoring (este último, presenta el reto de la fabricación de microprocesadores en mediano plazo) sin olvidarse de las bellezas naturales que representan una facturación cercana al 8% del PIB (Turismo).

Otro aspecto alentador es la evolución del desempleo, que se sitúa en un 8,1%, acercándose cada vez más al anhelado 6%, una cifra que Costa Rica no experimenta desde hace más de 19 años. Este indicador refleja la robustez del mercado laboral y sugiere un escenario favorable para los trabajadores costarricenses. Claro está, en medio de una transformación de puestos de trabajo como de los hábitos y consumos de los costarricenses.

En el frente de la inflación, la tendencia negativa persiste con un -1,28%, marcando el quinto mes consecutivo de valores en descenso. Este fenómeno, impulsado por la disminución en los precios de las gasolinas y combustibles, tiene un impacto positivo en el poder adquisitivo de los ciudadanos, quienes ven aliviada su carga financiera en un contexto global de volatilidad económica, aunque en la Canasta Básica alimenticias, faltan “algunos ajustes”.

La percepción internacional de Costa Rica también ha experimentado progresos sustanciales, como lo demuestran las recientes mejoras de las Calificadoras de Riesgo Standard & Poor's, Moody's y Fitch Ratings. Estas evaluaciones positivas no solo fortalecen la reputación del país a nivel global, sino que también abren puertas a inversiones y oportunidades que contribuyen al crecimiento sostenible. El mejor ejemplo, es la colocación de los Eurobonos en sobre oferta de estos y largo plazo (31 años) y con un diferencial sobre Bonos del Tesoro Americano cercano a los 250 puntos base.

A pesar de estos logros económicos notables, la Costa Rica del vaso medio lleno también enfrenta desafíos importantes que requieren atención (la parte medio vacía).

La persistente inseguridad, en gran medida derivada de ajustes de cuentas relacionados con el narcotráfico, puede elevar la cifra de homicidios hasta 900 en el transcurso de 2023. Este fenómeno subraya la necesidad urgente de abordar cuestiones de seguridad (Ciudadana y Judicial) para garantizar un entorno propicio para el desarrollo continuo.

Además, la distribución desigual de la riqueza (Coeficiente de Gini 2022: 0,54) persiste como una sombra en el panorama económico. Aunque ciertos sectores han experimentado un crecimiento notable, el acceso equitativo a las oportunidades económicas sigue siendo una tarea pendiente. La disparidad entre quintiles plantea desafíos sociales y económicos que deben ser abordados con políticas más inclusivas y no tanto, en Programas Sociales.

Asimismo, la disminución del valor de los ingresos reales (Casi un -19% en los últimos 10 años) para gran parte de la población subraya la importancia de implementar medidas que aseguren un crecimiento económico que beneficie a todos los estratos sociales. El desafío reside en garantizar que el progreso del Vaso Medio Lleno, también se refleje en la mejora tangible de la calidad de vida y consumo para todos los ciudadanos.

La Costa Rica a medio llenar, presenta un panorama económico prometedor, respaldado por sólidos indicadores de crecimiento y estabilidad. Es de suma importancia seguir promocionando al país como un destino idóneo para sus inversiones en todo sentido.

Sin embargo, los desafíos en materia de seguridad, distribución de la riqueza e ingresos reales requieren una atención cuidadosa para asegurar un desarrollo equitativo y sostenible en el futuro, pues los demás países del vecindario se mueven rápidamente (Panamá y El Salvador están al acecho de “robar el mandado” como se dice coloquialmente).

Mientras se exploran las cifras alentadoras que pueblan las páginas económicas en Costa Rica, es crucial reconocer que, en este escenario, los ticos no solo observan un vaso medio lleno, sino que tienen ante ellos un amplio surtido de fuentes de bienestar y desarrollo. Por eso el vaso debe verse de la mejor manera, y esa es de poder llenarlo hasta el final !!!